Fue usada como vigilante en un lote de unos recicladores, allí recibio un golpe en su ojo, cuando la rescatamos tenia el ojo por fuera e infectado, tuvimos que operarla y lamentablemente no logramos salvarle el ojito, pero eso no le impide ser feliz y disfrutar la vida en la fundación. Es temerosa de personas desconocidas, pero una vez entra en confianza es dulce y amorosa.
Adopta hoy, será tu mejor decisión.