Adoptar a Jack, un perrito que le falta una mano es una oportunidad para brindarle una segunda oportunidad a un ser vivo que ha enfrentado dificultades. Al cuidarlo y amarlo, puedes ayudarle a superar cualquier obstáculo y demostrarle que siempre habrá alguien que lo ame incondicionalmente. Juntos, formarán un equipo valiente y lleno de amor, y tendrán una conexión única e inquebrantable que perdurará a lo largo del tiempo.